jueves, 31 de enero de 2013

En el altar del propio ego




Es curioso como somos los seres humanos… que con tal de destacar somos capaces de tirar por tierra el respeto de años.

Esta claro que después de muchos años de esfuerzo y trabajo en las artes marciales, uno puede estar tentado a ponerse medallas en la pechera (aunque sean de hojalata), y ya sea a trabes de Internet, libros o revistas marciales, pueda llegar a atribuirse meritos o conocimientos que uno sabe perfectamente que no son suyos… o lo que es lo mismo, mentir como un bellaco.

A  lo largo de la larga historia de las artes marciales, se han visto toda clase de embustes, destinados únicamente a elevar al mentiroso por encima de sus iguales… así por ejemplo "fulanito" afirmara que el maestro de su estilo le concedió tal o cual grado en su lecho de muerte, que solo el conoce tal o cual técnica o cata “secreta” o que un día que nadie miraba, el anciano maestro alabó su trabajo por encima de el de sus demás alumnos… etc.

Este tipo de comportamientos son bien conocidos por todos los practicantes de las artes marciales, da igual la época histórica o el país de origen.

Estas afirmaciones (especialmente si se dejan por escrito) no sirven para nada más que para confirmar nuestra poca inteligencia emocional, ya que su única función es alimentar nuestro ego y solo nos granjearan enemistades entre nuestros iguales.

No esta mal el sentirse orgulloso de los propios triunfos, pero si entramos en las pantanosas tierras de la mentira y las medias verdades, solo sacaremos en claro fango… que con un poco de mala suerte nos tendremos que tragar; ya que entre hermanos todo se sabe.

Ya lo dice el refranero Chino, “El que sabe, calla, y el que no sabe, habla”, que, curiosidades de la vida, tiene su contrapartida nacional:


“Dime de que presumes…”

sábado, 19 de enero de 2013

Es un asco hacerse viejo






Si amigos, es un asco… y si, ya lo sabemos todos que es “el ciclo de la vida” y tal, pero en esto de las aamm el envejecer nos cierra algunas puertas.

Sin ir mas lejos, en nuestra escuela de Hung Gar estamos muy atareados preparándonos para participar en varias concentraciones y torneos… con el campeonato de España como horizonte final. Y claro, Patxi, nuestro Sifu ha tenido de ir seleccionándonos para trabajar más intensamente unos u otros aspectos… y así, llegado el momento éramos tres los alumnos que teóricamente podríamos prepararnos para competir en Sanda (que para los que no lo sepan, es la versión deportiva del Kung Fu; algo parecido al Kick Boxing con proyecciones), para lo cual nuestro Sifu ha invitado a un veterano boxeador, para hacer algo de cross-training, que tan de moda esta.

Y lo que ha sucedido es que, por mis 34 años, finalmente me he quedado fuera.

En realidad ya me lo esperaba… pero no por ello me jode menos. Efectivamente la competición a un alto nivel es muy competitiva, y no se trata solo de estar en buena forma, sino del rodaje previo necesario para hacer un buen papel en el ring… y es ahí donde los años me traicionan. La competición a ese nivel esta fuera de mi alcance porque para cuando haya acumulado la experiencia necesaria, ya seré demasiado mayor para poder competir…

Así que, así están las cosas… ¿y esto que significa?, pues nada en realidad.

En el Hung Gar aun me quedan muchos caminos por andar. Así, por ejemplo, no tengo impedimento alguno si quisiera competir en la categoría de Formas (Katas en Japonés), ni en competir en Sanda a un nivel más “amateur”; y desde luego no tengo ningún problema en aprender el Kung Fu de mi sistema (ni en aplicarlo después al nivel de mi habilidad y condición física… ó sea, como cualquiera).

Unas puertas se cierran y otras se abren.

Y es que ya lo dice mi abuelo… “Es malo hacerse viejo… pero peor es no llegar”.

lunes, 14 de enero de 2013

5 Años de Kung Fu: Un momento para reflexionar






Este año 2013 empiezo mi quinto año de Kung Fu, y más que una lista de propósitos para el año, creo bastante más interesante el pararme un momento a reflexionar sobre como me ha cambiado la vida el caminar por la senda del Boxeo de la Familia Hung.

En realidad, si lo miro con cierta retrospectiva, el iniciarme en el Hung Gar Kuen era una decisión natural, e incluso obvia… desde que puedo recordar siempre he tenido un carácter inclinado hacia la confrontación física… y necesitaba un estilo igualmente directo.

Con los años fui probando distintas artes marciales, como fueron el Judo, el Kenpo o el Aikido, pero no terminaban de llenarme… cada cual por un motivo distinto, pero ciertamente algo tienen los estilos Japoneses que no terminan de encajar con migo.

Luego vinieron otros deportes y actividades… hasta que llego el momento adecuado y empecé con el Hung Gar. Sin duda, este es el único estilo que ha logrado encajar con mi forma de ser… para empezar es un estilo muy completo técnicamente, con tres siglos de antigüedad, que exige forma física, que se acerca a la meditación, que entrena con armas, endurecimiento, combate deportivo… todo esto combinado con un muy buen ambiente entre compañeros y con Patxi Oloriz, nuestro Sifu.

Echando la vista a tras, veo claramente que mi vida ha mejorado muchos enteros desde que empecé con esto del Kung Fu. A nivel físico la diferencia es enorme en todos los aspectos, y a un nivel puramente psicológico, estoy mucho más a gusto con migo mismo y con los que me rodean (que no es poco).

También es verdad que progresivamente el Kung Fu ha ido haciéndose un hueco cada vez más grande en mi vida, lo cual a veces tiene sus dificultades, ya que hay que cuadrarlo con los requerimientos de una vida personal plena y un horario laboral exigente; sin embargo, gracias a la comprensión (y no poca paciencia) de mi familia y especialmente de mi pareja, el camino se va andando… ya veremos hasta donde me lleva.


Que tengáis un buen viaje por el vuestro.

miércoles, 9 de enero de 2013

Never, el caballero de la luna



Tanto la portada, como las ilustraciones de este libro, son de la propia autora


Este es el titulo del primer libro que publica nuestra joven compañera de Hung Gar Thaÿs Lazcano López, a traves de la editorial éride ediciones.

Como podréis comprobar en la propia sinopsis del libro, “Never, el caballero de luna” es una novela de corte fantástico ambientada en un mundo completamente nuevo, que nace en la propia imaginación de nuestra compañera y que nos ira mostrando a trabes de sus más de quinientas paginas, y una multitud de ilustraciones de la propia autora, las luces y sombras que pueblan sus sueños y pesadillas.

Y sin más dilación, aquí os dejo la sinopsis de esta interesante novela de fantasía:

Sobre la arcaica Tierra inmortal creció la leyenda del poderoso caballero oscuro, un temible guerrero que arrasó todo territorio existente, extinguiendo a humanos y demonios por igual. Tras más de mil años, vestigios de dicha leyenda llegan a manos de un joven muchacho, que ni vampiro ni demonio tratará de seguir los misteriosos pasos de su padre que no solo le conducirán al prohibido pasado sino a la forja de un nuevo futuro.

Gestado en tiempos tenebrosos, y educado en la hostilidad de la tierra de los inmortales, Foref descubrirá los secretos jamás revelados de los antiguos sabios. Gracias a su fuerte carácter y su voluntad de fuego hallará un destino no muy distante al que narran las antiguas leyendas de las épocas más pretéritas. En su épico viaje tropezará con dos compañeros inolvidables cuyos objetivos no distan de su propio hado. El gran lobo verde también llamado el arquero hechizado y el perturbado necromante.

Tres historias paralelas que convergen en una misma, desentrañando las profundidades de aquellos libros prohibidos en los que se relataban las hazañas de hombres invencibles, brujas y elfos, dragones, criaturas del abismo oceánico, tesoros de los olvidados y remotos tiempos, dioses y sombras del pasado.